Dominando la ciudad, en una alta columna se encontraba el príncipe feliz y toda la gente lo admiraba. Ese mismo día una golondrina que había retrasado su viaje, se enamoró de un junco, se encontraba feliz con él hasta que se aburrió; esta decidió volver a su viaje de repente se hizo de noche y decidió pasarla en la ciudad, descanso en una estatua de oro; de pronto le cayeron tres gotas miró intrigada hacia arriba y apreció que el príncipe tenía los ojos empapados de lágrimas.
Antes el príncipe era muy feliz y así murió, ahora que estaba en ese lugar podía ver toda la triste pobreza que lo rodeaba, le contó a la golondrina sobre una costurera que tenía un hijo que estaba muy enfermo y le rogó que le llevara el rubí del puño de su espada; la golondrina le hizo caso y cuando regresó se quedó dormida.
Al día siguiente, la golondrina debía de partir, pero el príncipe le rogó que se quedara una noche más. Le pidió otro favor, que le llevara su ojo que estaba hecho de zafiro para un joven que estaba escribiendo obras, pero no tenía dinero ni para comer y el otro para una niña que iba a ser golpeada por su padre ya que había hecho caer cerillos al agua.
La golondrina tenia mucha pena del príncipe así que decidió quedarse con él, este le rogó que volara sobre la ciudad y se percató de la pobreza de, el frío y hambre que padecían los niños; la golondrina regresó donde le contó lo que había visto, el príncipe pidió a la golondrina que le arrancara hoja por hoja el oro de su cuerpo y se lo diera a los pobres.
Ya era invierno y la golondrina se acercó al príncipe, le dio un beso y su cuerpo casi moribundo se deslizó hasta sus pies. el frío colaboró para su muerte; el príncipe al ver esto su corazón de plomo se le partió. Vinieron las autoridades las cuales observaron el estado en que se encontraba el príncipe y la golondrina. Decidieron fundir el metal de su cuerpo, porque ya no tenía ningún valor pero no pudieron hacerlo con su corazón, éste y la golondrina muerta fueron echados a la basura, Dios pidió a uno de sus ángeles que le trajera las dos cosas más hermosas de la tierra, el ángel trajo el corazón de plomo y la golondrina ante lo cual Dios lo felicito.